Sandalias hippies chic

Alguna gente dice que la mejor manera de vivir en sociedad es ponerse en los zapatos del otro, pero no siempre es algo sencillo. No siempre es algo sencillo hasta que creamos esta categoría en donde, no solo podrás encontrar una enorme cantidad de sandalias, sino que muchas se adaptarán a tus tallas y gustos, y que además, te harán ponerte en los zapatos de un hippie de 1960 o 1970 y ser cool y amable y solidario y todo paz y amor.

Según los antropólogos de la moda, las sandalias son de los calzados más antiguos que se tiene registro y por ende, que existen. Datan de alrededor de 10,000 años atrás y puedes encontrarlas en muchos museos (además de tiendas, claro). Pero los zapatos que encontrarás en nuestra página, son todos de unos cuantos añitos después, son todos realmente hermosos, únicos y están todos a la venta. Pasa y velos para que nos des la razón.

Los artículos que aquí encontrarás van desde las conocidas chanclas, ojotas o chinelas, las cuales hicieron aparición en 1960 y aquí siguen, adaptando sus diseños, modelos, colores y materiales pero muy presentes; pasando por las llamadas sandalias tipo Jesucristo, que fue siempre el calzado predilecto de los hippies (y no solamente ¿cierto?); hasta las sandalias más elegantes que llegaron en 1970, se lucieron en las calles más rimbombantes, festejos sociales y nunca se fueron.

Ideales para épocas de calor y perfectas para cualquier tipo de atuendo. Si partimos de la propuesta de moda hippie, con pantalones acampanados, faldas largas o cortas y vestidos, las sandalias con cuerdas o tiras de piel, favorecerán cualquier tobillo y marcarán los pasos de tu moda; al ritmo que tú elijas.

No podemos asegurar que sea como un vestido negro que va con todo, siempre y para cualquier ocasión, pero estamos seguros que te costará muchísimo salir de esta sección, y luego, quitarte las sandalias que elijas. Un último comentario: aunque sea quítatelas para dormir… ándale, te las vuelves a poner la mañana siguiente… ¡Bienvenidos!

Hippies información relevante: ¿Cómo me doy cuenta si una sandalia es, efectivamente hippie?

En este texto te compartiremos algunas características que puedes tener en cuenta para reconocer una sandalia como hippie.

Lo primero a tener en cuenta es la altura. Un calzado hippie puede manejar los 2 extremos, o es realmente alto que prácticamente te llega hasta casi la rodilla o es bajito, a la altura del tobillo. Ya sea sandalia a nivel de piso o de las sandalias de estilo romano, es un calzado hippie y una u otra queda divino.

Otro asunto serían los accesorios, aditamentos o agregados; o más bien, la falta de ellos. Si bien las tendencias modernas o de estilo hippie chic nos invitan a combinar modas del pasado con líneas de diseño más actuales, si pensamos en un calzado hippie original, debemos verlos como la ideología misma: simple, natural, orgánico y con tonos acordes con la naturaleza.

Moda hippie: ¿Y los materiales? ¿Y los colores?

Claves. Los materiales y los colores hablan muchísimo también y nos dan la pauta de cuán representativo de la moda en cuestión, es el diseño del calzado.

Los materiales más comunes utilizados para el diseño y la confección del calzado hippie de la época de 1960 o 1970, son los mismos utilizados en la vestimenta en general. Los tejidos naturales, cordones, algodones, hilos, e inclusive, algunos aditamentos sencillos que son claramente extraídos de la naturaleza. Algunos ejemplos pudieran ser las piedras, canutillos de madera o coco, y demás accesorios de poco trabajo humano y mucho de los árboles y las plantas. Las pieles también tenían y tienen mucha presencia en las sandalias, ya sea para las bases, los cordones o detalles agregados. Debemos entender al calzado de aquella época como una prenda de mucha frecuencia de uso, por lo cual la piel era (¡y lo sigue siendo!) ideal para la confección.

En cuanto a los colores, en este caso los que aplican son los poco intervenidos y ya nos lo sabemos de memoria, seguro. Los verdes, beiges, naturales, crudos, blancos y todo lo que remita a flores. Lo cual es genial porque son colores que prácticamente van con todo.